Imagina que llegas a tu trabajo como cualquier otro día, y de repente te informan que estás despedido. Sin explicaciones claras, sin un aviso previo, y sin indemnización.

¿Qué puedes hacer?
¿Qué derechos tienes?

Si te encuentras en esta situación, no estás solo, y aquí te explicamos cómo protegerte.

¿Qué es un despido injustificado?

Un despido injustificado ocurre cuando un patrón rompe la relación laboral sin una causa válida o sin seguir los procedimientos establecidos en la Ley Federal del Trabajo. En términos simples: si no hay una razón legítima, el despido es ilegal.

Lo que la ley te garantiza como trabajador.

En México, la Ley Federal del Trabajo está de tu lado.
Si te despidieron sin justificación, tienes derecho a:

• Indemnización por tres meses de salario integrado.

• Pago de salarios caídos desde el momento del despido hasta que se resuelva el caso.

• Prestaciones pendientes, como vacaciones, aguinaldo y prima vacacional.

• Reinstalación en tu puesto, si decides no aceptar la indemnización.

¿Qué hacer para defender tus derechos?

1. Mantén la calma y evita firmar documentos bajo presión.
Los patrones a menudo intentan que firmes tu renuncia o un finiquito que no corresponde.

2. Recopila pruebas.
Registra la fecha, lugar y circunstancias del despido. Si hay testigos, pídeles su apoyo.

3. Busca asesoría legal.
Contacta a un abogado especializado en despidos injustificados para que te guíe en cada paso.

¿Cómo demandar un despido injustificado?

El proceso es más sencillo de lo que parece:

• Solicita una audiencia de conciliación en el Centro de Conciliación Laboral de tu localidad.

• Asegúrate de contar con asesoría legal para negociar un acuerdo o llevar tu caso a juicio.

• En muchos casos, los trabajadores obtienen una resolución favorable sin siquiera ir a juicio.

Consejo clave: Conoce tus derechos antes de que te despidan.

La Ley Federal del Trabajo protege a los empleados de despidos injustificados, pero estar informado es tu mejor herramienta.